¿Alguno de ustedes ha sentido cómo el silencio se posiciona y se materializa entre la garganta y la boca? ¿Y a punto de formarse las palabras aspiras profundo, muy profundo, tratando de colocar el aire suficiente para que éstas suenen claras, precisas, contundentes y... nada... sólo silencio? ¿Y lo vuelves a intentar y nada... y el aire, las ideas, las emociones, las palabras se trasladan a la orilla del ojo derecho y salen del cuerpo en forma de una lágrima casi involuntaria? ¿Y que la gente voltea y piensa que eres alguien absurdo y fuera de sitio que llora por cualquier cosa? Así, hoy, aquí, en estas horas, exactamente.
sábado, 31 de octubre de 2009
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Deberias escuchar.. Los ojos mojados.. de Diego Vasallo..
ResponderEliminarCoco