martes, 27 de enero de 2009

In memoriam

No puedo escapar a la nostalgia. Ya son 19 años y tu ausencia se acrecenta en nuestros corazones.

Que la memoria y tu ejemplo te mantengan en nuestras vidas.

Así, nunca morirás.

"Déjame reposar, aflojar los músculos del corazón y poner a dormitar el alma para poder hablar, para poder recordar estos días, los más largos del tiempo.

Convalecemos de la angustia apenas y estamos débiles, asustadizos, despertando dos o tres veces de nuestro escaso sueño para verte en la noche y saber que respiras.

Necesitamos despertar para estar más despiertos en esta pesadilla llena de gentes y de ruidos.

Tú eres el tronco invulnerable y nosotros las ramas, por eso es que este hachazo nos sacude.

Nunca frente a tu muerte nos paramos a pensar en la muerte, ni te hemos visto nunca sino como la fuerza y la alegría"

Algo sobre la muerte del Mayor Sabines
Jaime Sabines

lunes, 26 de enero de 2009

Fábula - Danzón dedicada a ....

Con la misma mala leche, aderazada con mucha hiel y hasta con güácara de borracho dedico esta Fábula - Danzón a...

Fábula aplicable a toda la clase política del país, bueno, a casi toda, solo al 99% de ella.

Fábula política sin moraleja

Cuando las carreras a Campo Traviesa fueron reglamentadas, y todas sus trampas quedaron al descubierto, vino el Zorro a acusar a la Tortuga de corrupta y chapucera.

Conversación en la mesa

Todo fue cuestión de lanzar una sencilla pregunta y la imaginación se puso a jugar con las ideas y las palabras. Así, Bk dio el motivo, yo solamente hago la relación de los hechos.

El Género Humano-Limón

- ¿Qué me pasa si me como la semilla de un limón?- Fue la pregunta que hizo Bk y que detonó la conversación que acompañaría a nuestra comida.

- Nada – Contesté con seguridad y con aplomo…Mmm… bueno, aunque no sé bien. Porque quizá lo único que podría ocurrir es que esa semilla se anidara en tu estómago y comenzara a crecer. Lo cual ya podría comenzar a convertirse en un problema, porque de crecer mucho, las ramas y las hojas del pequeño árbol buscarían salida por tus oídos. Eso, visto de manera pragmática, podría representar un ingreso extra para nosotros, porque notificaríamos a los medios de comunicación sobre tu particular condición y entonces podríamos cobrar por cada entrevista y cada imagen que quisieran tomarte. Yo podría ser tu representante, pero como no es sano mezclar los negocios con lo familiar, pues dejaría que escogieras a alguien más. Ahora, pensándolo bien, si te crecen mucho las ramas tendría que decidir si llevarte a la estética a que te corten el cabello o con un jardinero, para que te poden los indicios del arbusto que habita en ti. Pero eso también tendría sus ventajas, porque cuando el limón comenzara a dar frutos, en lugar de cosechar los que crecen muy cerca del lóbulo de tus orejas, los podrías aprovechar para utilizarlos de aretes, y con ello, ahorraríamos una lana, aunque casi siempre serían color verde-limón, y quizá también podrías pintarlos de colores diferentes con anilina, para que combinaran con el atuendo que para ese día eligieras, pero que sea un día sin ningún indicio de lluvia, porque si no, tus aretes bióticos podrían comenzar a despintarse y arruinarte tu, tan siempre pulcra, presentación… Mmm y aquí me viene una duda mayor, que sí que se podría convertir en un problema para mí: el día que te enfermes ¿te llevo al médico o con un agricultor????

- ¡Que interesante! Pásame la sal, por favor – Fue tu única respuesta a toda la serie de cavilaciones que en ese momento me llegaban en cascada.

En silencio, mientras agotamos el contenido de nuestros platos, yo seguí especulando sobre el fantástico hecho de estar casado con la única mujer del género Humano-Limón. Bueno, podría ser.

A manera de bienvenida

Este es el nuevo espacio virtual de mi bitácora. Aquí recupero lo que existía en mi espacio anterior chemagoso.spaces.live.com, del cual sólo diré que cada vez se volvía más difícil su administración y actualización. Así, que pasado casi un mes, decidí que sí quería seguir con esta experiencia de los blogs, aunque en verdad, no sé bien para qué, a ciencia cierta.

No soy un esclavo de las estadísticas como para poder afirmar que es para seguir en comunicación con las muchas personas que alguna vez han leído mis desvaríos, anécdotas sin sentido y fábulas sin moralejas. No sé cuántas personas visitaron mi bitácora anterior, mucho menos, sé qué opinión les mereció los textos que ahí encontraron. Salvo dos o tres excepciones, el asunto de la retroalimentación no fue lo que precisamente distinguió a chemagoso.spaces.live.com.

Quizá siga insistiendo en esto de la escritura, porque es una de las cosas que me hacen sentir menos agobiado por lo monocromática y plana que puede ser la vida cotidiana. Aunque también es un contrasentido, porque la mayoría de las ficciones que escribo se alimentan de ahí: de la cuota de rutina diaria, que es necesaria para mantener el orden de la vida (Cortázar dixit), pero exagerada, pero vista de manera ilógica, quizá irreverente, un tanto apasionada o desapasionada, según sea el caso, pero ante todo, con sentido del humor, negro, blanco, del color que sea, al fin y al cabo humor.

Así, que siendo las 6:38 de la tarde del lunes 26 de enero de 2009, declaro formalmente inaugurado el nuevo espacio virtual de la bitácora del Chema.

Bienvenidos sean



PD A medida que aumenten mis habilidades y mi familiaridad con blogspot, iré recuperando los albúms de fotos que ya tenía, además de seguir alimentando este espacio, con otros nuevos.

Diciembre de 2008

26 diciembre

A manera de colofón (provisional)

No le pido al olvido que nos cubra con su manto eterno y nos perdamos en el universo de las personas sin pasado, ni tampoco solicito a la memoria que nos conserve en la mitología diaria de los seres nostálgicos de esperanza. Este espacio cierra un ciclo, con un futuro nada claro y un bloguero presa de la incertidumbre cibernética y literaria. Es el momento de un adiós que envuelve un hasta luego silenciado.

25 diciembre

Para la reflexión

"He ido en busca de la cultura, el pensamiento, la sensibilidad, el señorío, y nada de lo que he ido a buscar fue más grande de lo que dejé: ni la cultura fue más ancha, ni el pensamiento más alto, ni la sensibilidad más honda, ni el señorío mayor..."

IKRAM ANTAKI
Historia


24 diciembre

Misterios de la ciencia

Miles de anatomistas en el mundo han abierto e inspeccionado una miríada de corazones, pero todavía no hay alguno que se atreva a asegurar que tiene las pruebas materiales de la presencia del amor en nuestros cuerpos.

16 diciembre

La frase que da motivo a estas líneas, comenzó a acosarme hace algunos días. Absorbido por lo cotidiano, apenas y si tuve tiempo de anotarla en algún pedazo de papel, porque cada vez confío menos en mi memoria. Sin poder estructurar una historia como lo dicta la ortodoxia o los cánones (está de más la aclaración, porque casi nunca los he seguido, o lo que no sé si es peor o mejor, creo que ni siquiera los conozco), la saco un momento del cajón de los pendientes, y son solamente los trazos preliminares de una historia por contar, por si alguien quiere hacer una cirugía estética con la idea. No hay principio, no hay trama, no hay final, sólo una frase que volaba por ahí. Si colaboras podría ser un Cadaver Exquisito o un Frankestein de palabras. Lo que vale es la intención. Insisto, por sí sólo, el grafitti reclamaba atención.


Historia sin principio ni final

-"Pienso en ti y se detiene el Universo".

Era la séptima ocasión que leía el grafitti en la pared. Retomó el paso y continuó caminando sin cesar, siempre intentando alcanzar al horizonte que toda la vida se empeñaba en alejarse. Una cuadra y a la izquierda, dos cuadras más y a la derecha, siempre de frente al Sol, que estaba a punto de cederle el otero a la Luna. La vida como un cosmos, la vida como un laberinto. Los días. Los meses. Los años que, atorados en el alma, parecen siglos de ansiedad y de tristeza.

10 diciembre

En el ejercicio de recuperar y ordenar algunos escritos que andan extraviados, entre mis papeles, mi computadora y el ciberespacio, he encontrado algunas cosas que me han llamado la atención. En tanto tomo la decisión final sobre lo que pasará con este blog (no sé si tomará un receso, caerá en el silencio definitivo o emigrará a otra parte del ciberespacio), pego dos textos que encontré. El primero, sobre Liliana, creo que se elaboró en 1997 ó 1998, y sufrió alguna pequeña corrección en 2006, según consigna la fecha de última modificación del archivo. El segundo, sobre el violonchelo, es del año 2000 y no recuerdo si ya alguna vez fue publicado en papel o ya ha circulado por el ciberespacio. Lo siento, soy muy despistado.

¿Quién conoce a Liliana?

I
Liliana se moría de frío cuando la conocí. Ese día ni el más cálido de los abrazos podía abrigarla. Su sonrisa apenas si se escapaba al castañeo incesante de sus dientes. Liliana fue en ese momento una mujer congelada. Pasados los días, el clima ha sido menos perverso con ella. Sus extremidades y ánimo poco a poco han ido recuperando su temperatura normal. Liliana se transforma, reflorece y se expande. Ahora ella es la más bella flor que habita el jardín de mis sueños. Vaya transformación, de mujer a flor. Liliana es así.

II
Puede que Liliana no tenga alas como los ángeles, mas sin embargo supera a las hadas con su grácil vuelo nocturno, el cual comienza cuando traviesamente se columpia en la tímida sonrisa de la luna, antes de brincar y unirse a la estela multicolor de los cometas que surcan este cielo oscuro y profundo. Liliana es así. Vigila el sueño de los insomnes. Ella cruza todas las noches el cielo.

III
Pónme el rostro que quieras e invéntame una vida que gire en torno a ti. Róbame los sueños, amenázame con amarme para siempre, miénteme sobre las verdades de la distancia y asegúrame que el olvido no es más que otra mentira verdadera que has inventado para mí. Sí, así de simple, conviérteme en cómplice de tus dudas y temores, que en las incertidumbres y sombras de tu vida siempre estoy. No temas lastimarme y dime todo lo que guardas para mí, que no existe ya nada en este mundo que me pueda sacar de esta dolorosa prisión de soledad a la que me ha condenado tu desamor.

Eso me dijo Liliana ayer y no supe qué decir…….. Le he tenido que mentir una vez más.

IV
Nunca hace promesas que sabe que son difíciles de cumplir. Las metas tienen que ser siempre a corto plazo. No intentes explicarle las ventajas y comodidades de los tiempos largos y los venturosos porvenires de la vida. Liliana no lo entiende así. La vida es una y tan solo dura los minutos que componen a los días. Cuando la luna releva al sol en su función de vigía astral, ella se encomienda a tantos santos y vírgenes recuerda; no sea que mañana le sea vedado el derecho de experimentar un día más y en ello, se le va la vida.

V
Las redondeces de su cuerpo huelen todavía a pubertad. La miel de sus labios abren puertas insospechadas a los abismos del amor diáfano y sincero. El cabello, negro azabache como las noches sin estrellas, simplemente es la más tormentosa de las tentaciones a la que es cada vez más difícil resistir. Así pueden ser todas mis noches en las que me atrapa el insomnio. La de un espectante velador que intenta ser poeta para la mujer que duerme todas las noches a su lado. Liliana todavía no entiende el porqué de mis ojeras y me recomienda ir al médico urgentemente.

Sonata No. 1

Hace un mes, congelado literalmente hasta los huesos, a las 2:00 p.m., en el centro de la Plaza Roja en Moscú, decidí dejar mi nueva vida y regresar a buscarte. Ni el vodka ni el oso misha pudieron traer hasta acá mi memoria y mi corazón. Era tan persistente el recuerdo, que el día que observaba el rostro ímpavido de la momia de Lenin, grité y salí corriendo del mausoleo. Puedo jurar que el objeto necrofílico tomó los rasgos de tu cara y me dijo: "cobarde....sigue huyendo, pero por más kilómetros que pongas de por medio, sabes que me perteneces".... Con los pies adoloridos por el imprevisto maratón, media botella de tequila entre pecho y espalda -la nostalgia es dura de sobrellevar- hicieron de mi presentación ante el director del Conservatorio un acto de intimidación: ¡Me voy! ¡La música no es lo mío! ¡No aguanto más el socialismo! ¡Si.. ya sé que en Rusia no existe más el socialismo desde tiempos de Gorbachov! ¡Tan sólo vengo a informarle que me voy!. El violoncello mal vendido, dos fotografías del Lago de Pátzcuaro repartidas entre mis compañeros de habitación y un trompo de Quiroga regalado al hijo del director de la orquesta de cámara. Mochila al hombro, subí al tren y partí rumbo a Bruselas, fue la conexión más barata que pude conseguir. Montarme al avión en Bruselas, una escala en Londres, otra en Nueva York y por fin México lindo y querido, si muero lejos de ti. La comitiva de recepción fue más parecida a un funeral que al regreso del hijo pródigo a la tierra que lo vió partir. Y no era para menos. Mi familia vendió el coche y empeñó la casa para apoyar el sueño del hijo consentido: ser el chelista más grande del mundo. Cuatro meses después de la esperanzadora partida, aquí me tienen de vuelta. Pregunto por ti y la noticia no pudo ser más devastadora. Habías perdido la batalla contra un cáncer que se manifestó cuando ya era imposible contraatacarlo. Ahora, sábado tras sábado, siempre a las 6, toco al pie de la tumba, la sonata que en Moscú compuse para ti.

04 diciembre

Un brindis por la nueva arquitecta

Desde el infinito azul del cielo michoacano, pedimos al viento que lleve nuestro cariño y espíritu a ti, en este día tan importante; felicidades y muchos abrazos; y recuerda: cada vez que el viento enfríe tus mejillas, significa que Bk y yo estamos ahí, juntito a tu corazón.

Tus primos, los tan de esos, los "morelianos".

01 diciembre

Lluvia en la ciudad

Hoy sintió un deseo incontrolable de llorar y no lo hizo. Ayer, al mediodía, le había ocurrido lo mismo y también logró controlarse. Mañana, cuando salga a recorrer las calles, el cielo se le vendrá encima de manera solidaria y le ayudará a sacar de su cuerpo y alma, toda la tristeza humedecida del adiós anticipado, del adiós definitivo. Ha comenzado la noche y las nubes negras ya comienzan a acosar a la luna. Creyó escuchar en la radio sobre las probabilidades de lluvia en su ciudad. No hizo mucho caso, ella ya se estaba ahogando desde muchos meses antes.

Noviembre de 2008

20 noviembre

La referencia geográfica no es arbitraria

Los trenes de Embrun

La tomó de la mano y llegaron juntos a la estación. Miraban y calculaban, al mismo tiempo, la longitud de la vía. Sabían con exactitud cuál era el punto de partida, pero no el de llegada. Buscaron verse a los ojos, pero las lágrimas no les permitieron cumplir con el deseo. Una estación, una vía, el sonido de un silbato y la sombra de un tren cada vez más lejano fueron el marco de este abrupto despertar del sueño del amor. Al día siguiente, los diarios sólo informaron del clima. Lo cotidiano, convertido en infinitos copos de nieve, se impuso una vez más sobre la voluntad de sus ciudadanos. La vida sigue igual en Embrun, Canadá.

11 noviembre

Homenaje involutario, que no inmerecido, al maese Rafa

El cielo y el pintor

En estos tiempos en el que los aviones se desploman y los "pájaros comienzan a eructar"*, le he pedido a mi amigo el pintor que haga del cielo su lienzo y comience por recordarnos, que la vida y los colores van más allá de la triste monotonía visual de esta nota roja que nos agobia día con día.

* Paráfrasis de un aforismo de Cioran

02 noviembre

La música que corre por las venas

En este preciso instante, en el que la nostalgia toma forma de nota musical, levanto la mirada, te encuentro, busco tus ojos, sonríes sin saber porqué y confirmo que todas las decisiones que he tomado en la vida han sido las correctas para poder estar esta noche a tu lado, en el preciso instante en que la nostalgia tomó forma de nota musical y necesito urgentemente de tus brazos. La música que corre por las venas ha llegado al corazón.

Octubre de 2008

24 octubre

Cuestión de suerte

Quiso el destino que te cruzaras en mi camino. Quiso la suerte que te sacara la vuelta. Todo es simple y tiene una explicación. El azar nos jugó una mala pasada. ¿Qué le vamos a hacer?

Palabras

"- Dime, tan sólo, algunas palabras para llenar este vacío..." El ángel tomó sus alas, se acomodó la aureola y se fue. El silencio siguió gobernando sus días.

16 octubre

De un mundo raro*

Mientras el vestido de novia iba cayendo al piso, corazón y alma rompieron con el pasado. Era una mujer nueva. Con un presente realizado. Sin un futuro confirmado. Los ojos se le inundaron de lágrimas. El esposo creyó que lloraba de felicidad. Los caminos se habían comenzado a separar.

* Mención involuntaria a José Alfredo Jiménez

10 octubre

Sin título

De pronto, se le agotaron las palabras: el último reducto con el que enfrentaba a la soledad. Se acostó con la esperanza de no tener que despertar un día más.

Septiembre de 2008

27 septiembre

La musa está de vacaciones

Del maese Agustín Monsreal

"... En tanto se agota la eternidad, te espero. Vuelve..."

20 septiembre

No me cabe la frustración y la rabia en el alma

Morelia, 15 de septiembre

Es la ciudad que llora. La ciudad que sangra. La ciudad que clama justicia. La ciudad que está sumida en la perplejidad y el miedo. La ciudad que ya no es. La ciudad que algún día fue.

03 septiembre

El mes de la patria

No tengo más patria que tu corazón
Hernaldo Zúñiga

Arrancó la hoja al calendario y al leer "septiembre 15" se sintió un siglo más viejo. Reparó una vez más en la fecha y recordó que, hacía 4 años, ella se había llevado consigo toda noción de identidad. Su cuerpo era el único motivo por el cual habría enarbolado alguna bandera. Se sentó frente a la ventana y en absoluta resignación, miraba cómo los fuegos artificiales iluminaban el cielo mientras pintaban de colores su tristeza con cada lágrima que humedecía el piso de la habitación. La patria le había dolido en el corazón.

Agosto de 2008

20 agosto

Historia con final inmediato

Todos sus besos fueron preludios de un adiós anticipado. Un día, cualquier día, simplemente, se fue.

12 agosto

De las despedidas

Tuvo que acceder a un “adiós” cuando sólo se había propuesto un “hasta luego”. El “nos vemos pronto” se convirtió en tan sólo un “quizás” apostillado a la conversación. Así suelen salirse de control las despedidas. Algunos piensan en la vuelta, mientras otros, ya le están poniendo candados a la puerta y a la memoria para que nunca vuelvan a regresar.

Síndrome de abstinencia verbal

Quizá siga sorprendido por el fallecimiento de Alejandro Aura, que para mi pesar, también se llevó, para allá, al otro mundo, las palabras y se puso a jugar con ellas mientras espera a sus amigos y arman de nuevo las mesas de debate de las ideas, los versos y las prosas.

DESPEDIDA
Alejandro Aura


Así pues, hay que en algún momento cerrar la cuenta,
pedir los abrigos y marcharnos,
aquí se quedarán las cosas que trajimos al siglo
y en las que cada uno pusimos nuestra identidad;
se quedarán los demás, que cada vez son otros
y entre los cuales habrá de construirse lo que sigue,
también el hueco de nuestra imaginación se queda
para que entre todos se encarguen de llenarlo,
y nos vamos a nada limpiamente como las plantas,
como los pájaros, como todo lo que está vivo un tiempo
y luego, sin rencor, deja de estarlo.

¿Se imaginan el esplendor del cielo de los tigres,
allí donde gacelas saltan con las grupas carnosas
esperando la zarpa que cae una vez y otra y otra,
eternamente? Así es el cielo al que aspiro. Un cielo
con mis fauces y mis garras. O el cielo de las garzas
en el que el tiempo se mueve tan despacio
que el agua tiene tiempo de bañarse y retozar en el agua.
O el cielo carnal de las begonias en el que nunca se apagan
las luces iridiscentes por secretear con sus mejillas
de arrebolados maquillajes. El cielo cruel de los pastos,
esperanzador y eterno como la existencia de los dioses.
O el cielo multifacético del vino que está siempre soñando
que gargantas de núbiles doncellas se atragantan y se ríen.

Lo que queda no hubo manera de enmendarlo
por más matemáticas que le fuimos echando sin reposo,
ya estaba medio mal desde el principio de las eras
y nadie ha tenido la holgura necesaria para sentarse
a deshacer el apasionante intríngulis de la creación,
de modo que se queda como estaba, con sus millones,
billones, trillones de galaxias incomprensibles a la mano,
esperando a que alguien tenga tiempo para ver los planos
y completo el panorama lo descifre y se pueda resolver.
Nos vamos. Hago una caravana a las personas
que estoy echando ya tanto de menos, y digo adiós.

Tomado del blog de Alejandro Aura

http://www.alejandroaura.net/wordpress/

Julio de 2008

31 julio

Notas apresuradas sobre un evento importante. Parte II

Sábado 3 de Mayo

Afirmar que dormí sería mentir de manera descarada. Tuve periodos cortos de sueño, en que sólo por instantes, pude desconectar el cerebro de la ansiedad que crecía en el estómago y una especie de hueco, que hacían que mis latidos los sientera lejos, distantes, casi ajenos a mí. Resignado a no poder dormir, me levanté a eso de las 6:30 am y me dispuse a tomar el 1er baño del día y preparar todo el operativo y ajuar para el evento.

Largas dos horas y pasé por mi espadachín, mi fiel escudero, mi valet parking, mi mozo de espadas o como fuera que le nombrara, a mi cuate el Amós, quien había pernoctado en la casa de mi casi casi cuñado (en cuestión de horas se le quitó lo casi casi... muy a su pesar). Y las sorpresas comenzaron. Ojos rojos, aliento a botiquín ( o sea a alcohol), con las agujetas sin amarrar, daban cuenta de la dura pelea y largo debate que sostuvo el Doitor Martínez Ayala en territorio potosino con Carlos, dizque en defensa de mi honor y el de tooodos los michoacanos, sobre la importancia de la influencia tarasca en territorio güalchichil durante el periodo prehispánico y en la formación de la ciudad colonial y la necesidad de rehacer alianzas político-militares a través del matrimonio, para conservar el dominio de los territorios allende el Lerma, que en conclusión, no llegó a nada, y que sólo los obligó a consumir, muy a pesar de ellos brandy, vodka y cualquier bebida cuya fórmula estuviera impregnada de etil. Síntesis: desvelado y crudo -yo intuía algo de sus molestias, pero horas después sabría y confirmaría que realmente estaba muy deshidratado-.

A las 9 de la mañana llegué al hotel con mis tiliches, Amós incluido, a tomar posesión de la habitación de donde saldría horas más tarde con el disfraz de novio. Asamblea familiar mediante, pudimos tomar algunos alimentos, gorditas de Morales, que son de maíz y rellenas de guisos, para regresar nuevamente al hotel a la espera de la hora marcada. Una caminata breve, una visita rápida y consumista a una librería (sí, el día de la boda, también compré un libro y comencé a leerlo) y a relajarse. Nunca entendí mejor la teoría de la relatividad del tiempo, pues por más que presionara al reloj, éste no avanzaba. y a medida que transcurrían los minutos nuevas e intensas sensaciones iban invadiendo mi cuerpo y mi mente. Cerca de las 11:00 horas, me levanto y me tomo la temperatura y confirmo que los nervios los canalicé en forma de fiebre. Me baño con agua fría y pretendo con ello contrarrestar el malestar. Sólo logro tranquilizarme unos cuantos minutos y de vuelta en pie. Trato de comentar mis malestares y pesares con mi espadachín y bodyguard, pero trae tal cruda y somnolencia, que soberanamente me ignora y sigue roncando en plena imitación de los sonidos de Kung Fu Panda (que todavía no se estrenaba, pero ya estaba en los avances de la temporada). Por fin, llega la hora planeada. Otro regaderazo y comenzar con el ritual del traje. Cual torero antes de partir plaza, los dientes castañeaban, el corazón daba saltos desordenados y la boca del estómago crecía y crecía hasta formar un agujero negro en mi interior. ¡A echarle valor! No había venido de tan lejos y movilizado a tanta gente, para hacer un papelón en la ceremonia. Así, que comencé a respirar pausado, trataba de monitorear mi pulso y además, tenía que sonreír. "Que no me caiga", "que no vaya a dar el ranazo en plena ceremonia", "que no se vaya a descoser el pantalón de las nachas", y otras cosas tan importantes como éstas, comenzaban a ocupar gran parte de mi CPU en ese momento.

Veinte minutos antes del evento la breve comitiva que me acompañaría hasta el altar (no de sacrificios) estaba lista, sabiendo de mi obsesión por la puntualidad -que de no ser por el color de piel y que hablo español, algunos dirían que en términos de citas soy inglés-, así que nos dispusimos a que el buen Amós tomara el control del automóvil para llegar al templo indicado, porque como le dije: “no es de buena nota social que el desposado llegue manejando su propio auto”... y que como única respuesta obtuve un rotundo: “No, no me siento muy bien. No vaya a ser que choquemos y arruinemos la fiesta que ya está pagada”. Así, conduciendo mi propio auto, llegué a la cita con el destino… Y coincidir...

04 julio

Negrita

La seducción de la poesía

Muerta el alma el deseo la hace espuma
Silvia Tomasa Rivera

"Muerta el alma el deseo la hace espuma”

Leyó, una y otra vez la frase, hasta comprender que lo que bebía en cada trago eran los restos de su alma. Apuró las últimas gotas y lanzó el vaso al piso. Reconoció, muy a su pesar, que él era un hombre más que se dejaba ganar la partida por la vida. El último deseo lo agotó en el momento mismo en que se arrojó al paso del tren. Las vías, en lugar de sangre, presentaron rastros de espuma, con olor a poesía y alcohol.

01 julio

Una de maestros

Quiso el maestro enseñarle a sus alumnos cómo es que deben de andar por el mundo, cuando ellos ya habían terminado de construir sus propias alas. Intentaron volar a la primera y fallaron. Un nuevo impulso y otra vez los pies pegados al piso. El maestro, con serenidad, tomó sus libros y sonrió. Cuando ellos fueran lo necesariamente humildes para preguntar, él les explicaría que para volar, se necesita que cuerpo y alma, en común esfuerzo, exploten los valores más nobles de la condición humana. Mientras no fuera así, caerían una y otra vez. El maestro no tiene prisa, los alumnos sí. Él, sigue esperando.

Junio de 2008

30 junio

Las piedras y el viento

Lanza una piedra más y cada vez se convence más de que está a punto de acertarle un golpe al Sol. Esta tarea parece igual de inutil, como cuando en una ocasión quiso atrapar a la Luna con un lazo y bajarla a la tierra para regalársela a Marcela. Ella, ya no está, y no sabe qué hacer con esa tristeza que le está quemando las entrañas. Mientras tanto, a medida de que se le agota la fuerza en el brazo y las piedras a su alcance, camina lentamente, casi flotando, en busca de esa barranca, a donde habrá de arrojarse, con todo y tristeza, para que, paradojicamente, al paso de poco tiempo, se convierta en un recuerdo vago e inútil, que el viento del olvido se ha de llevar para siempre.

13 junio

Sin título (Se aceptan propuestas)

Cálculo infinitesimal de daños y pérdidas. Supresión del factor de riesgo hasta el 0%. Estimación constante del margen de ganancia máximo. Su vida era una tabla financiera, en la que a final de cuentas, siempre terminaba perdiendo. Y de nuevo: a ajustar números y fórmulas, hasta que el corazón encontrara en ellas, las respuestas que siempre están en las personas. Camino largo e incierto, y en el que por única compañera llevaría, de por vida, a la soledad tomada de la mano.

03 junio

Va el texto del Master Amós (perdón, Doctor, aunque no cure ni un pulque), pensé en no seguir publicando cosas por algún tiempo, en respeto a la memoria, y por eso mismo, por respeto a la memoria, las palabras siguen dando vida a los amigos

Esta es así como la versión "jesusmontesca" de una expedición a SLP. O lo que es lo mismo, la visión en blanco, pero sobre todo en NEGRO, del invitado que más se reventó y bebió en la boda...

Memorial y crónica de las bodas del Chema Alonso
Por el cronista negro

I
Si lo recuerdo bien (léase con tono de chilenos doblando al español un documental). Todo comenzó un jueves en que me llevaron demasiado temprano a la casa del dr. Gómez (sólo para la mamá del Chema, para el resto es el "Nene", "Dr. Simi", o "El Oriel"), quien estaba literalmente echando la güeva viendo un partido del Cruz Azul, la "Máquina Celeste" o "Los Cementeros" para los que saben de futbol y tienen panza chelera. Como a mí lo único que me gusta del "Juego del hombre" son las bebidas que lo acompañan, decidí incorporarme a la expectación de los 90 minutos en que otros corren tras la pelota mientras le entraba a las pruebas del mezcal de "pechuga", al de "café", al "barato" y hasta creo que un "torito" perdido, traído por reconocido poeta michoacano para su querido yerno. Como después de tanto deporte da hambre y puesto que ya estaban cerradas las carnitas de "siempre", nos dirigimos a unos tacos sobre la Avenida cuyo nombre no recuerdo, pero para referencia de todos aquellos antropólogos aficionados, donde se ubican El Faraón, La Jungla y El Kumbala bar, puros centros de sano esparcimiento; sin embargo, nuestra necesidad de carne era distinta, así que, tras intentar uno de cada "sabor" para conocer la sazón del chef, me refiné dos de tripa y otros de bisté (que no estaban de lo mejor, pero ya con hambre: ¡Ora invítame a cenar, no!). Regresamos y seguimos discutiendo las habilidades de algún central o la ineptitud de los centros delanteros mexicanos, mientras esperábamos a una dueña de las quincenas del dr. Oriel (sólo para la mamá del Chema), pero como dice el poeta: y nos dieron las dos y la una... y nada que llegaba, quesque se fue a que le dieran su despedida... claro que yo no comenté nada, porque siempre me ha caracterizado mi buen juicio y discreción. Por fin, como a eso de las tres (a la una a las dos y a las...) llegó llena de tierra (del camino, no se piense otra cosa), la doctorante en dos doctorados y tres maestrías, Alma, que nos tenía con el ídem en la boca, no habría que decir nada más, pero conociendo a los morelianos es preciso contar que la despedida otorgada por sus alumnos del Instituto Tecnológico Superior de Pátzcuaro (en Tzurumútaro, paradojas geográficas) fue en el municipio de Salvador Escalante, ya mirando a La Huacana. Espero que este comentario deje a salvo el honor de la dama en cuestión y le limen los apéndices óseos que ya tenía colocados el dr. "Simi" "Lar". Nos fuimos a dormir, porque saldríamos de "ma-dru-ga-da" [cito: Lar, dr. Simi], cada oveja con su pareja, y como yo no soy borrego me tocó la compañía de los moscos de La Concepción, cerquitita de San Juanito Itzícuaro, como quien dice, Capula.

II
Llegó el viernes, pero entre que se bañaban de nuevo los novios, de este lado de Michoacán, y entre que cerraban las llaves del gas, sacaban la basura, nos dieron [cito: Sabina, Joaquín] de nuevo las 10 y las 11 y ya me estaba encabronando, porque si hubiera sabido que la "ma-dru-ga-da" del doctor "Lar", eran las 11 a.m. hubiera desayunado mis güevitos revueltos con bolillos "ca-lien-ti-tos" en mi casa. Las cosas sucedieron con una rapidez sorprendente, si uno es la tortuga de la fábula. Apenas estábamos llegando al Vip's de Calzada la Huerta [doy estas referencias para los potosinos y aquellos ignorantes de la geografía urbana moreliana, y para que se sepa que hay varios, no namás uno], a desayunar un "omelet d'chapignon" y unos bolillos de Aurrerá que no cambio por mis "güevitos revueltos" con bolillos de Don Plácido [que es el panadero de mi pueblo, lo digo para los potosinos y los ignorantes en la gastronomía jesúsdelmontense], cuando por teléfono celular, el Ing. en Tec de la Mad. Little Bull is innocent Gómez [emparentado por línea materna y paterna con el dr. Lar] habló preguntando ¿dónde íbamos? Íbamos a salir temprano, dijo el dr. Nene, pero ya ven que me gusta el viento en el rostro [por aquello de sentirse idem y poder usar lente oscuro].

III
Resulta que la caravana de Jicalancas [porque los de Uruapan son Tecos, muy tecos] ya estaban desayunando birria de animal muerto adelante de Querétaro de La Corregidora [heroína a la que han adoptado con mucho ahínco los queretanos sin saber que era vallisoletana, pero como de éste lado tenemos tantos héroes que no nos molesta prestarles algunos, por si quieren los potosinos, tenemos de primera, segunda y tercera división]. Fue cuando el dr. Oriel (sólo para la mamá del Chema) se prendió y dijo "On the road!", pero como la doctorante Alvarado habla francés, italiano e inglés técnico y yo nomás español, no le entendimos con la premura necesaria, hasta que lo vimos pedir la cuenta y ponerse sus lentes oscuros. Todavía tardamos otros 30 minutos en salir, porque como era feriado muchos chilangos deciden "vacacionar" en las ciudades patrimonio de la humanidad, comprar artesanía y comer bien, pero como eso sólo lo tiene la ciudad de la litíca rosa, o las riolitas a según sean geólogos o snob, (no es que no vayan a Querétaro a ver cerros pelones o a peregrinar al cerro del Cubilete e ir por charamuscas a Guanajuato, pero lo que es parejo no es chipotudo, decía mi abuelo). Ya estábamos "en el camino" [nótese que fui al diccionario "Oxford"] cuando el doctor Lar de dijo a la doctorante Alvarado: ¡mi Alma! Pásame mis guantes de piloto automático [nótese que la doctorante Alvarado es Alma para todo el mundo, pero su Alma nomás del dr. Lar] , y resulta que traíamos dos derechos ¡Chin! [yo canté mentalmente: ¡tan tan tara tara tan tan! -con tonada de tío vivo, o musiquita de payasos]; pero no tuve tiempo de amarrarme a la estructura del potente vehículo, que aunque '96 corre como si tuviera 10 años menos, los cuales asegura el dr. Oriel (sólo para la mamá de Chema) que pasó guardado en la cochera de su tío, en cajones, de la Puebla ¡será por eso que trae placas del '95?

IV
Llegamos en 3 horas, y eso que fuimos a asomarnos a Salamanca, porque ahí, ahí me hiere el recuerdo... aunque el poeta debió decir hiede por las refinerías y termoeléctricas. No bajamos de 160 ni cuando dos patrullas de caminos hicieron el intento de seguirnos, les ha de haber dado güeva, no pensaron que trajéramos un "venado" para la mordida y hacer "el chivo" o de plano nos vieron con cara de decididos porque prefirieron dos camionetas que transportaban productos agrícolas del Altiplano potosino en las fisonomía [tenían la opuntia en el pelo y la cara para que me entiendan los potosinos]. Ya cuando el paisaje se componía cada 3 km de un mezquite polvoriento me dije: se me hace que esto ya no es el Bajío, así que aprovechando que ya el jugo y los 3 cafés agudos del Vips hacían presión en mi vejiga, decidí entrar en contacto con el paisaje a la manera del turista: me bajé a miar. Yo creo que hacía como 10 años que no le llegaba agua a las candelillas, porque se levantaron y hasta como que quisieron enverdecer, si me tomo otro jugo ¡hasta flores echan! [léase con tono de Cruz Treviño Martínez de la Garza y Garza, "No desearás la mujer de tu hijo", época de oro del cine nacional, que es el mexicano, aunque dos o tres me hayan confundido con checueslovaco]. No alcancé ni a ver "las jorobas" [dícese de los pasos a desnivel que sirven para dar salida y cruce a los vehículos que transitan sobre la carretera Querétaro-San Luis, y que llega hasta el centro de histórico potosino, donde se convierte en Carranza y si la siguen hasta donde cruza con Muñoz, ya llegaron a la casa de los Ballín, lo digo para los morelianos, ignorantes en la topografía urbana de San Luis Potosí... es mi barrio San Miguelitooo]. Luego de una pequeña distracción en que no seguimos a Carranza [que después comprendí es ilógico en San Luis], llegamos al hotel mas alto de la ciudad el Real Plaza, ubicado [es obvio decirlo? en Avenida Carranza, que yo supongo es Venustiano, pero no entré en detalles porque luego lo tachan a uno de snob y no es de buen gusto hacerlo estando en tierras extrañas, y más al norte del Lerma !Santiago y a ellos!]. Ahí nos topamos con la comitiva uruapense que ya tenía horas de pasearse en el elevador y mirar lo chiquita que se veía la gente desde arriba [es pertinente decirlo ¿o impertintente? porque el del pueblo aguacatero sólo tiene 7 pisos y éste tiene el doble, claro que no es pertinente burlarse de ellos porque les dáapor jugar a "la roña" -o "la traes"- con metralleta y al que pierdan ¡le cortan la cabeza! Como decía la reina de corazones en una película "infantil" basada en un cuento de un matemático pederasta inglés y que nunca he entendido].

V
Como todos teníamos hambre y estábamos deseosos de trabar un encuentro cercano con las "carnes" de la Huasteca [yo me enteré que eran "ésas" carnes de "engorda" hasta que las ví en mi plato], salimos a comer a un restaurante muy famoso y recomendado por el dr. "Simi" quien aseguró que lo había conocido hace 5 años y lo recomendaba porque los "caballitos" eran 11 mmlts. más grandes que en otras cantinas. La dichosa fonda chiquita. que parecía restaurante, estaba ubicada, si no mal recuerdo, en la Av. Carranza del centro de San Luis. Todos pedimos cosas diferentes para ver qué cara ponían los demás; pero como íbamos con pocos ánimos de etnógrafos y más como turistas, no nos gustó lo que nos sirvieron, doña María Mendoza incluso sacó su bolsa de chiles e intentó componer el asunto, pero era demasiado tarde, el daño a nuestra percepción estaba echo y el café de olla sólo contribuyó a consolidar la representación negativa de la cocina potosina. Doña Mari me invitó a tomar café con aguácatas que habían llevado para un pariente que vive en San Luis, y quien no soportando la presión se fue a Paracho a comer pan como Dios manda, calientito y con café mezcla de caracolillo y placuela que vende La Lucha, luego de importarlo de Chiapas y Veracruz, para mantener la fama que se creó hace un siglo y que todos mantenemos como secreto a voces sólo por el orgullo.

VI
A eso de las 3 de la tarde y como quien sale a "carrancear" [¿me pregunto si los morelianos salen a "maderear" los potosinos salen a "carrancear"?] llegó el novillo despuntado y como queriendo llorar... por su "valet", "guardaespaldas", "sparring" y amigo "El Amós" (para la mamá del Chema, para todos los demás soy el ¡DOCTOR Martínez, tiene una llamada en urgenciassssssss!). Salimos del Real Plaza, de donde tomé un cuadernillo con unas oraciones porque me pareció que ni en Silao había estado yo en un lugar donde pierden la virginidad más niñas que en el carrusel, pero eso si, muy devotamente: ¡esto que hacemos no es por vicio, ni por fornificio, sino por hacer un niño a tu santo servicio! ¡Señor hágase tu voluntad! y ¡vénganos tu reino!

VII
Debo decir que después de tantas visitas a Tuzópolis, el Chema manejaba su ford fiesta como un verdadero potosino, con una prisa increíble por salir de Carranza y tomar Muñoz [¿será por un sentimiento claustrofóbico?] Vuelta en la exComer por la entrada al Campestre, Ágata [Tugsteno? u otro mineral] y ya estábamos en la residencia Ballín, donde la novia intentaba llenar, con unas uñas que ya las quisiera Niurka para apretarse un barrito, bolsitas de chocolates y luego hacerles el nudito con un lacito rojo en compañía de su prima que tenía otras iguales [la imagen que me llegó a la mente era la de una madre “teibolera” llenando aguinaldos para el cumpleaños de su segundo hijo, el que tuvo con un zeta, ayudada por Yesenia, su cuatita del alma, claro que a ambas les faltan 20 centímetros de estatura y curvas distintas]. Luego de los besitos mua mua y de platicar el viaje, que parecía lo había hecho en el Interpraise ¡mzzzzzquiteeeeeeee! ¡zum! Me convidaron a conocer Pozos y la sede oficial del capadero, perdón, de la ceremonia; puesto que yo no tenía, en ése momento, nada que hacer, decidí acompañar a la feliz pareja, a su cuñado, a la novia, a dos sobrinos, 10 cajas de Torres, como 20 botellas de vino tinto, 5 charolas con regalos y, por supuesto, los chocolates, al salón-jardín, donde sería la "garden party" al día siguiente, salimos por Muñoz, hasta el lecho de un río seco convertido en avenida que nos condujo a una serie de pasos a desnivel, cuyo único fin es confundir a los turistas, porque luego salimos a la carretera Querétaro-San Luis, que como ya hemos visto en repetidas ocasiones (y seguiremos viendo) llega hasta Carranza, sólo que en éste momento era San Luis-Querétaro. En una de las "jorobas" nos salimos para pasar por debajo del puente y llegamos a un empedrado, luego al pueblo de Pozos, con sus mezquites en la plaza, su fuente sin agua, y en una esquina el salón: un jardín bardeado con tres mezquites en las orillas, donde afanosamente una tropa de guachichiles [otrora fieros a la sedentarización] se afanaba en colocar unos toldos. Una vez ubicada la "señora" dueña o administradora del "changarro", esperamos la llave para meter toda la cava en un baño que pomposamente llamó "el baño privado", donde se cambiaría la novia [¿nunca supimos qué?], espacio de tiempo que fue suficiente para que Mariano, el más pequeño de los dos, un cochinito dulce y cortés [léase con línea melódica de Gavilondo Soler, "Los tres cochinitos"] se cagara en los calzones. Los varones se vieron con cara de:
- "eso no es de nuestra competencia".
La novia los vio con expresión facial de:
- "tengo las uñas postizas largas, no me limpio ni yo".
Y yo los ví haciendo:
- "yo los acabo de conocer hace 45 minutos".
Afortunadamente la Madre Patria cría a sus hijas para hacer críos, y se lanza la novia de Feli a la hazaña de limpiarle la coliflor a su futuro sobrino [si eso no es amor, es masoquismo, Feli].

VIII
Una vez terminados los "últimos detalles de la ceremonia" regresamos al cuartel central, ahí, El Chema (para todos, Gór-dóo, para Rebeca, y sólo José Manuel para su mamá) pidió un salvo conducto para dirigir a las tropas de ocupación del batallón Teniente Alemán, venidas allende, San Miguel de Allende, a un abrevadero seguro; si las miradas mataran hubiéramos celebrado un funeral, pero como afortunadamente el novio ha probado tener una concha de berilio con blindaje 10, salimos a reencontrarnos con los mismos en otros lugares, que son idénticos... ¡Que comiencen los juegos! Y la ovación se escuchó de pie... El general Pitacho aprobó con una mirada inspeccionadora el lugar, decorado con un gusto barroco por el pancracio que era de esperarse, mientras todos los demás pedíamos ¡Una cerveza indio! Y el mesero nos veía con cara de: ¡han de ser de maguey porque el nopal no se da en sus tierras! [Y tiene razón, puro tequilana weber weber] el general decidió ver si el "wiskey on the rocks" estaba inyectado diferente en "La tercera caída"... ¡Salud! ¡Salud! y que hable el novioooo... quien anegado en lágrimas y luego de disculpar a su casi casi "media naranja" en un tequila sunrise por estar "ocupada en los últimos detalles antes de la ceremonia" se empujó entre 8 y 10 cervezas [aquí disiento en su aseveración de que los prendidos éramos yo y mi general....
-¿Cómo que yo y mi general? ¡Mi general... y yo!
Bueno, el general y el dr. Simi [que se sentía seguro porque estaba chupando con su mamá a un lado]. ¿En qué estaba? Es que la interrupción gramática del dr. Lar me distrajo... ¡Ah! Si, el Magister Leo [no por analogía con la sapiencia del distinguido michoacano dr. León -lo digo para los potosinos-, sino porque le encanta la cerveza yucateca], estaba ya en el punto de mandar a dormir a las damas y llevarnos a dar el tour "San Luis de noche" [que me imagino debe ser por Carranza; pero hacia las "Jorobas", pura intuición masculina]. Justo antes del grito de ¡Retirada! antes de lanzarnos con el de ¡Zafarrancho de combate! lidereados por el general Pitacho, !Que las armas michoacanas se cubran de gloria y vómito en San Luis! Sonó un timbre amenazador... todos buscaron su celular, hasta yo que no tengo, por aquello de evitarle la incomodidad al festejado, quien se retiró al fondo a la derecha para evitar el puchis punchis que delataba nuestra ubicación táctica en el campo de batalla. No valieron súplicas, ni explicaciones, y ante la amenaza de que llegara el ejército del Centro, comandado por algún Ballín, para requerir al posible desertor decidimos hacer una retirada táctica y dar parte de guerra al Alto mando, que en el cuartel general ya había oprimido tres bolsitas de chocolate “Costanzo” hasta hacerlo en polvo.

IX
La experiencia de llegada fue una epifanía de lo que, seguramente, vivirá el magister Leo en el futuro, medios coloraditos [pero no por la vergüenza], claro que me di cuenta que había caído en blandito cuando su, hasta entonces futura suegra y su cuñado el mayor, nos prepararon unas quesadillas en unas tortillas pequeñas [que mi ojo antropológico juzga el único tamaño disponible en las tortillerías de San Luis, si queda tan cerca Querétaro deberían pedir cuchillas más grandes]. Las cuales comenzamos por rechazar [como lo dicta el "Manual de buenas maneras y urbanidad" del sabio, y difunto, Carreño], pero que terminamos empujándonos con singular alegría. Una vez establecido el juego de miradas entre los futuros conyugues, breve instante en que me sentí hijo de divorciados, decidieron que "las visitas tienen sueño" y mandáronme a los aposentos reservados para mi persona en la casa de don Carlos Ballín, señora Nadia e hijossss..... ¡del demonio! [ya explicaré por qué] En el trayecto, que he de decir es salir hasta Muñoz y luego seguir hasta adelante del Walt Mart de Muñoz [desconozco si hay otro, Walt Mart, porque Muñoz parece muy común, casi tanto como Carranza, en tierras potosinas], nos detuvimos por un par de cocas [de las de botella de 1 lts. no las de bolsita, como acostumbran otorgar los meseros colombianos a los poetas] y unas aguas quinas... ¡Ahí sospeché! La comandancia general me había puesto al tanto de los planes aviesos y cuál era mi misión secreta allende, San Miguel, más p'al norte... Llegamos y sin tiempo de decir ¡ahí nos vemos! Escuché un chirríar de llantas y un ford fiesta que se perdía en la lejanía, hacia Muñoz ¿creo? a toda velocidad [es decir entre 50 y 60 km/h], decidido a hacer la labor de sacrificio en la media cancha... y como un chilang... michoacano 100% ¡Puro Michoacán! Nunca rehusa beber gratis decidí medir a mi contrario [¡Me saca 20 cm de alto pero yo le saco 20 de ancho, así que estamos a mano! Me dije] y comenzaron los forcejeos alrededor de unas cubas de Torres 10, bebida demasiado dulce para mi gusto abajeño acostumbrado al etanol rebajado con mezcal de Zihuaquio servido en chiles perones, pero... ¡A la tierra que fueres, toma lo que te ofrecieren! [hice un cambio porque el verbo chupar se presta a malos entendidos]. Ya tarde, luego de romper un vaso, no porque fuera boda judía ¡Mazel tov! sino porque la coordinación no era como para hacer una cirugía, nos fuimos a dormir, al fin que la ceremonia era tarde... pero he ahí que los angelitos no se habían desvelado y a las 8 de la madrugada ya estaban espantándome las moscas de la boca y picándome con una escoba las costillas para saber qué producía los ruidos ensordecedores que hacían aullar a los perros de los vecinos:
- ¡¿Es un oso?!
-¡Niños! Ese oso esta crudo ¡Déjenlo!
¡Pero hay un Dios! y ya los veré en 20 años.
Así las cosas decidí bañarme, ponerme mi vestido de etiqueta, aunque sin la playera amarilla, porque, aunque tengo varias, siempre suponen que no [extraño interés en el guarda ropa de un oso].

X
A las 9 de la madrugada escuché el potente motor de un ford fiesta que se acercaba por el rumbo de Muñoz, mi rápida intuición antropológica me dijo que sólo podía ser el Magister Leo, [con pellizcos en las chiches, para que no se notaran en la ceremonia], quien había quedado de pasar temprano por mí, ahora me transformaba de su guardaespaldas [o guardahígados] en "valet". Fuimos por su familia al Hotel, y decidió tomar Muñoz hasta Carranza y luego sobre esta hasta llegar al Real Plaza. Yo estaba mareado, pero, sorprendentemente, a pesar de que cerraba los ojos y respiraba profundo para evitar vomitar, siempre que abría los párpados me llega un "dejà vu", ¿parece que ya pasé por aquí?, y mi sexto sentido me ubicaba siempre, a mí, que me pierdo en Cuto, misterios que sólo la Providencia aclararán en el futuro. Una vez en el hotel, y reunido el clan Morales Palomares, aunque había más Palomares para la boda [sin albur], el anfitrión decidió llevarnos a comer unas "gorditas" potosinas, yo no tenía ganas, pero la combinación semántica y mis dotes hermenéuticas pensaron en una "fusión de horizontes", así que decidí dejarme conducir, por Carranza, derecho y luego tomar la avenida que era un río hasta, donde aseguran, hay una presa, lugar donde las sabrosas gorditas potosinas resultaron ser de maíz. Ni modo, ¡pásenme una de chicharrón prensado! para aceitar la imaginación y las arterias.
Luego de dos cafés de olla la circulación sanguínea seguía lenta, como si hubiera una manifestación en el zócalo de mi cuerpo. Me bañé de nuevo, intenté dormir en la cama Kig [Henri VIII] size, pero parecía que el aire movía el piso 15 del Plaza. No cumplí cabalmente con vestir al "mataor", ni darle su nalgada de la buena suerte, porque yo necesitaba un "oper cot". Bajamos al lobby, porque el coronel debería organizar a las tropas michoacanas, y mientras saludaba a los conocidos el mundo parecía lejanooooo, colores pastel y sonidos intensísimos, escalofrío, sueño, y retorcijones en la panza. Todo sea por un amigo.
Llegamos a la iglesia luego de tomar Carranza, y una vez abajo El Chema (para todos, el Gór-doó, para Rebeca y sólo José Manuel para su mamá) me dio la encomienda más grande del día, llevar el coche al estacionamiento. Me coloqué en el sitio del conductor, analicé la situación y me dije, ¿cómo chingaos se mete la primera? ¡Ni que fuera un auto chino de Elektra! Pero el pulso me fallaba, "los objetos pueden verse [y se ven] más lejanos de lo que aparentan" [sobre todo cuando estas crudo], por fin pude a-rra-n-car Ja-Lo-Ne-a-n-do el poderoso ford fiesta cuyo motor de ocho caballos, tres yegüas y un burro respondían bajo el impulso de mi huarache. Para colmo de males tenía que dejarlo en el último piso y dando vueltas en reducido espacio; no lo guacareé porque apreté los labios, respiré hondo y subía a toda velocidad [que como dijimos pueden ser entre 50 y 60 km/h, más si es de bajadita]. Arriba me encontré con el Alex, que acababa de estacionar el vehículo familiar y me vio con cara de: ¿Así lo vas a dejar?, claro que mi color amarillo, mi olvido al apagar las luces y el pulso de maraquero le revelaron mi catatónico estado... ¡Unas chelas recetó el doctor! pero como lo indica el "Manual de urbanidad y buenas maneras" ya citado, es de mal gusto entrar al templo en que se celebra la boda de un amigo con una modelo de bote disfrazada con una bolsa de papel, juro que sólo mi entereza y mi buen juicio en cuestiones de gusto me impidió hacerlo, también el maldito sol que parecía una lápida y que no supiera dónde había una tienda [es que no estábamos ni por Muñoz ni por Carranza, que eran ya mis rumbos]. Bendije al cura que se le ocurrieron los ventiladores en el techo, más útiles que las bocinas, al fin que nadie escucha el sermón. Ahí estaba yo con cara de pocos amigos [o sea la única que tengo] y con ánimo de "No me hablen", cuando la ví: ¡Voto a Dios! que nunca le había visto las rodillas, ¡y qué rodillas!, ni los hombros ¡y qué hombros! Ni en zapatos de tacón y los hoyuelos.... de las mejillas y la barbilla, [ah! Creo que ésos sí]. Ahí el chamuco entró en mí, no quiero poner por escrito los oscuros pensamientos que éste negro crudo tuvo al interior de un sacro recinto cuando vio a Mayra en su vestido de "garden party". ¡Hola! Saludos y yo hablándole como el Hidalgo de las arras que se dieron en la boda, de perfil; se sentó junto a mí y yo seguí hipnotizado sus movimientos, en gran parte porque mi contacto con el ceremonial católico es sólo de dos tipos: a través de documentos coloniales y en 3 bodas a las que he asistido. Nos paramos nos sentamos, la paz del Señor, y cuando me rascó el brazo con sus uñas para despertarme, poco faltó para que me lanzara sobre ella: ¡Hay niños presentes! Pues que aprendan.
Luego de las fotos y del acomodamiento en el vehículo, decidí unirme a la tribu Jicalanca para buscar un café expreso doble, con ánimos de levantar el espíritu y apaciguar los ánimos. Al encontrar la cafetería ya ánimo estaba predispuesto, costó $31, que todavía le debo a Anabel Gómez, y sabía a garbanzo tostado. La potente Mitsubishi de la mtra. Anabel Gómez no impidió que nos perdiéramos, ni que diéramos el aspecto de un narco de segunda y sus guaruras (en un cavalier '95) que estaban buscando a unos zetas. Luego de una vuelta equivocada en la "Joroba" para entrar a Pozos, llegamos al recinto, donde dicen, "...soltaron a la paloma", metáforas medio extrañas, pero que seguro vieron en alguna película romántica con Julia Roberts y Robert Downey Jr., Tom Hanks y Meg Ryan, etc., etc.
Luego de las fotos y del acomodamiento en el vehículo, decidí unirme a la tribu Jicalanca para buscar un café expreso doble, con ánimos de levantar el espíritu y apaciguar los ánimos. Al encontrar la cafetería ya ánimo estaba predispuesto, costó $31, que todavía le debo a Anabel Gómez, y sabía a garbanzo tostado. La potente Mitsubishi de la mtra. Anabel Gómez no impidió que nos perdiéramos, ni que diéramos el aspecto de un narco de segunda y sus guaruras (en un cavalier '95) que estaban buscando a unos zetas. Luego de una vuelta equivocada en la "Joroba" para entrar a Pozos, llegamos al recinto, donde dicen, "...soltaron a la paloma", metáforas medio extrañas, pero que seguro vieron en alguna película romántica con Julia Roberts y Robert Downey Jr., Tom Hanks y Meg Ryan, etc., etc. , luego de la boda por el civil. Ni siquiera supe si hubo pistola y epístola?
Comenzó el banquete de bodas y decidí que para acelerar el proceso sanguíneo comenzar con el alcohol era buena idea; además, Mayra estaba resguardada por el general y su amiga, en otra mesa, y yo no tenía ni el valor, ni la verticalidad como para intentar ir para allá; así que decidí quedarme a ver los toros desde la barrera. Poco sucedió, salvo que se perdiera dos veces el anillo del novio [sin albur, dedo chico, anillo grande]. Hasta que movieron una mesa me di cuenta que toda la tropa masculina de los Ballín estaban vestidos como la Rondalla de Saltillo.
Aquí hago una pausa, no porque ya estuviera demasiado borracho, sino porque debo dar una cátedra mañana [antes daba clases, pero desde que soy ¡Doctor Martínez, preséntese en anestesiologíaaaaa! ¡Entregue la bolsa de suero y la botella de formol que se llevooo!, doy "Cátedra"]. Además, si no leo yo, quién lee.

02 junio

Por el amigo Juri

" Déjame reposar,
aflojar los músculos del corazón
y poner a dormitar el alma
para poder hablar,
para poder recordar estos días,
los más largos del tiempo...

Te has muerto y me has matado un poco.
Porque no estás, ya no estaremos nunca
completos, en un sitio, de algún modo.
Algo le falta al mundo, y tú te has puesto
a empobrecerlo más, y a hacer a solas
tus gentes tristes y tu Dios contento...

¿Para esto morir?
¿para inventar el alma,
el vestido de Dios, la eternidad, el agua
del aguacero de la muerte, la esperanza?
¿morir para pescar?
¿para atrapar con su red a la araña?..."

Jaime Sabines
Algo sobre la muerte del Mayor Sabines

Mayo de 2008

29 mayo

Notas apresuradas sobre un evento importante

Lunes 28 de abril. Morelia

Todo intento por salir de la ciudad y acompañar a Rebeca en el último tramo de la organización del evento es bloqueado por lo inesperado. Hoy, al mediodía, con el equipaje en la maletera del coche, mi contador me dice que debemos hacer un pago extraordinario de un asunto aún no resuelto con Hacienda. Nuevamente me quedo sin dinero y por si fuera poco, comienza a llover. El agua me pega en el ánimo y decido que mejor esperaré hasta mañana para abandonar Morelia.

Martes 29 de abril. Morelia, Celaya, Querétaro, San Luis de la Paz, San Luis Potosí

Tengo el gusto extraño de viajar de madrugada. Aparte de lo tranquilo de la carretera, me gusta el hecho de llegar a desayunar a la casa de los papás de Rebeca. Todo transcurre con normalidad hasta un poco más allá de Querétaro. Cerca de San Luis de la Paz, comienzo a sentir unos extraños mareos que me obligan a detener la marcha. Supongo, erróneamente, que me falta un poco de cafeína y me tomo el acostumbrado café matutino. La molestia disminuye un poco y alcanzo mi objetivo. En cuanto veo a Rebeca se me viene el cansancio encima y le comento de los misteriosos mareos. Acordamos en consultar al médico y amigo de la familia, el Dr. De Avila, quien me diagnostica que tengo un poco alta la presión arterial, pero que al no existir ningún otro malestar, todo parece indicar que estoy psicomatizando el estrés por la boda. La solución: “tómese unos tequilitas y relájese, que no le va a doler”. Sigue la cuenta regresiva. No sistematizo qué más ocurrió este día, seguramente concluyendo y resolviendo pendientes y detalles. Llamo a la casa de mi madre, y me entero que su salud no está del todo bien .Una razón más para mi insomnio permanente.

Miércoles 30 de abril y 1º de mayo. San Luis Potosí de día, de noche y de madrugada.

Sigo con los molestos mareos y decido aceptar la terapia propuesta por el médico, hoy por la noche me tomaré unos tragos con mis casi cuñados y con algunos otros amigos potosinos. Rebeca termina por convencerme: “Mira, es mejor que sea hoy, porque mañana es día feriado, y así sirve que tú y mis hermanos se recuperan de la parranda, ya los conozco”.Llamo nuevamente a la casa y me tranquilizan: mi madre está en condiciones de viajar y parece que la delegación michoacana está ansiosa de venirse para acá. Un poco más tranquilo por esta situación y dando muestras de mi futuro adoctrinamiento hogareño me lanzo a afrontar el reto de la “despedida potosina”. Comenzó la fiesta en un bar llamado “El olvido”, continuó el festejo llevando serenatas por media ciudad y terminamos a eso de las 9 am del día siguiente, desayunando en algún lugar de la capital potosina. El resto del día, dormir, agua mineral, aspirinas y sueño, mucho sueño. Casi para terminar el jueves,¡milagro!, los mareos han desaparecido casi por completo. Más que médico es brujo.

Jueves 1º de mayo. San Luis Potosí.

Se me pierde la exactitud, que nunca ha sido una virtud desarrollada en mí, de recordar lo que hicimos este día. Recuerdo haber ido con la dueña del Jardín y algunos pendientes más. En la noche, los primeros amigos invitados al evento, comienzan a notificar su presencia anticipada en la ciudad. Comienzo a desarrollar intranquilidad y emoción al mismo tiempo. Rebeca, tranquila, como buena operadora logística de todo este asunto, mantiene la serenidad, mientras yo la pierdo. Ya quiero que pasen los 2 últimos días y que pase lo que deba de pasar.

Viernes 2 de mayo. San Luis Potosí , Villa de Pozos, San Luis Potosí

Liquidamos los últimos pagos. No se debe nada. Todo marcha bien. Comienzan a llegar por oleadas los invitados que vienen de otras ciudades. También comienzan las sorpresas, vinieron personas que creímos que no asistirían, y faltaron a quienes teníamos en el grupo de los más seguros. Ni modo, hubiera sido lo mismo de haber realizado el evento en Morelia. Para la hora de la comida, ya hay un buen de amigos instalados en el hotel sede. Grata sorpresa: mi familia y la de Rebeca coincidimos en el mismo restaurant y compartimos la comida y la sal. Un momento realmente agradable e inolvidable. Si lo hubiéramos planeado, estoy seguro de que no se habría realizado. Después del postre, salimos rumbo al jardín, en Villa de Pozos, a llevar la logística y material que necesitaríamos al día siguiente. De regreso, a un lado del hotel, tomamos la copa con Avila, la Familia Gómez y el Amós en la “3ª caída”, no por la procesión del silencio, sino alusiva a la lucha libre. Avila y el Amós se prenden, y toman delantera en la fiesta. ¡Cabrones! Como ellos no tienen que casarse al otro día. Así, que contento, moderado y recatado, me dispongo a dormir mi última noche como soltero.

Sábado 3 de mayo.

El día llegó, pero esto, esto es otra historia...

¿Continuará...?

19 mayo

Hombre callado

Hoy, después de casi un mes de absoluto silencio, abrió la boca y dijo adiós. Salió de la casa y nadie volvió a saber de él. Cosa más clara y directa no había dicho en la vida, jamás. Hombre de pocas palabras, o más bien de una sola palabra y la cumplió.

De vuelta

De nuevo en la ciudad, quiso poner en orden al universo y comenzó por su escritorio. A punto de tirar las hojas de los últimos meses del calendario, se detuvo por completo y se sentó a reir hasta llorar. Esos 60 días eran los más locos que le habían tocado vivir. Y sin más, guardó la sonrisa en la memoria y en corazón, y siguió en su épica tarea de acomodar al mundo y a las personas. No sabía con claridad qué era lo que estaba pasando, pero por su mente rondaba la idea de que era feliz, y el sólo hecho de pensarlo, le hacía menos pesado el trabajo que había emprendido. ¡Ah! Esos locos soñadores, de los que hacen faltan muchos en este mundo desbocado.

Abril de 2008

24 abril

Sorpresas que da la vida. Buscando un archivo de trabajo, recuperé este texto, del cual me acordaba poco

E-mail postergado


FROM: ulis_tef@manicomio.com
TO: jelly@heaven.com
SUBJECT: Historia compartida
DATE: Tue Jun 29 23:21:05 1999

Hoy, después de muchos meses te volví a encontrar en la red. No estaba dentro de mis planes, pero fue inevitable el encuentro. Pero ¿a qué tanto miedo? Fue absurdo. No podías verme, ni escucharme, tan sólo leer las lastimosas palabras que salían de mi ordenador para ti: "¡Que gusto! ¡A mi también! ¡Que bueno que todo vaya bien! Es claro que la elocuencia nuevamente se extravió en ese momento.

Las primeras frases que destellaron en el monitor me lanzaron a un espacio del universo que creía olvidado. Aún recuerdo la inocente pregunta que me arrastró a un torbellino de amor cibernético inimaginado:

- ¿Tú crees que dos personas que no se conocen físicamente se puedan enamorar?

Cómo me reí en un principio. Y tomando aire tono y docto, negué cualquier posibilidad de que aquello que preguntabas pudiera formar parte de la realidad.... tan sólo recuerdo, y de manera vaga que dije algo como esto: "quizás tengas razón... al fin y al cabo, el amor por intangible y extraño, es parte de un mundo virtual al que todos queremos acceder". Supongo tu reacción ante la explicación protofilosófica y posmoderna que habían dictado mis manos a través de las frías fibras ópticas.

Apenas habían transcurrido dos meses de nuestras largas y colgadas conversaciones cibernéticas y en mi mente rondaba ya la frase de "más pronto cae un hablador que un cojo".... ¡Cómo diablos te decía ahora que estaba completamente enamorado de ti! Sesenta días de charlas, tres llamadas telefónicas, dos kilogramos de cartas y una foto tuya que disipó cualquier nube de duda de mi amor por ti.

Así como comencé a levantarme todos los días con la incomodidad y frustración de no poder confesar lo que sentía por ti, de igual forma se manifestaron ciertos cambios y giros en nuestras conversaciones. Ya no era el hecho de celebrar y gozar de las maravillas de la tecnología; no, lo que importaba estaba por encima de los microprocesadores, de las tarjetas de red y de los protocolos de intercambio de información. Lo que necesitaba era saber cómo latía tu corazón, qué cantaban tus pulmones cuando respirabas, en qué pensabas cuando cerrabas los ojos. ¡Maldita contradicción! Las máquinas comenzaban a estorbarnos.

Dejamos que el tiempo transcurriera y sorteando todo tipo de imponderables, comenzando desde los giros insospechados del humor de tu padre y terminando con la inesperada nevada en San Diego que retrasó tu salida, por fin pudimos dar el paso que tanto habíamos anhelado: conocernos en persona y disfrutar en vivo y a todo color - ¿calor? - de las dulces mieles de nuestro amor.

El llanto de mi hija me vuelve al tiempo real..... casi no te he dicho nada por estar navegando en los surcos de la memoria...
- Yo Bien
- Tú Bien
- Todo Bien

La ecuación es casi perfecta.... ¿no lo crees?

Y si a pesar de lo anterior, no se encuentra uno del todo satisfecho....entonces tampoco este es el camino fácil hacia la felicidad.

Después de mucha insistencia logro convencerte de que sería muy bueno que recomencemos nuestra comunicación electrónica.... escribir y contarnos todo, como antes.

Y es extraño....realmente extraño.... la primera historia que contamos es la nuestra.

No sé qué decir....

Que estés bien

Como siempre...

YO

PD. Mi esposa ya encontró trabajo y la bebé cumplió dos años.... gracias por preocuparte.... saludos a Robert.

15 abril

Sin título

Cuando miró el reloj, lo hizo con toda la rabia e impotencia que sólo se pueden acumular a lo largo de toda una vida, porque sabe en el fondo que nunca le ganará una batalla al segundero y su inacabable marcha. Debajo de la pulsera que lo sostiene en su muñeca izquierda, la herida que nunca cicatriza, volvió a restarle unos minutos al saldo de su existencia. Una vez más, volvió a perder… El segundero avanza…

14 abril

San Lunes

Me levanté con el pie izquierdo y con el alma rota. Así es este lunes, frío y gris.

02 abril

Negrita
Como tortuga

Cuando las ideas se enganchan al vuelo de los pájaros, es mejor observar la vida con la paciencia y sapiencia de las tortugas, hasta tener algo prudente qué decir al mundo.

Marzo de 2008

20 marzo

POR QUÉ NO HE DE LLEVARTE

adherida a mí piel
como el agua de lluvia
que se escurre en el cuerpo

Silvia Tomasa Rivera

18 marzo

Sin título

Calculó con precisión matemática la profundidad de sus temores. Se dejó a caer en ellos con todo el optimismo que suelen acumular los idealistas. Los amigos, pesimistas consumados, apostaron en contra de él, desde la comodidad de su escepticismo. Para sorpresa de todos, cuando estaba a punto de tocar fondo, las alas del deseo que desarrollan los soñadores, le ayudaron a levantar el vuelo y ahora navega por la vida, con la serenidad y tranquilidad que sólo conocen los valientes. Ella, clavada en la aritmética de su conciencia lo vio caer, ascender y volar, y todavía sigue ahí, haciendo cuentas.

12 marzo

La rana con el cuello roto

Por un momento creyó que se le rompía el cuello y que el peso del mundo se le venía encima hasta aplastarla por completo. Por fortuna, la Rana despertó a tiempo y pudo entender entonces que la vida se construye con los pequeños esfuerzos individuales que a todos nos corresponden, y no con las falsas cargas de los que se creen elefantes. Sonrío y decidió dormir un poco más. Al fin y al cabo la maquinaria del mundo seguiría funcionando bien. El cuello dejó de dolerle y el corazón volvió a sonreír.

11 marzo

El beso

Acercó su rostro al de ella y la tomó por las mejillas. Cerró los ojos y deseó profundamente, que con ese beso, se convirtiera en parte de su cuerpo y alma, y que nunca más lo abandonara.
Una estrella fugaz desaparecía en la bóveda celeste; su deseo iba atado a ella.

05 marzo

Bandera rojinegra

La huelga también ha paralizado a este espacio. Sólo historias rojas o negras pretenden apropiarse de las palabras que han de consignarse aquí. Por eso, en solidaridad conmigo mismo, a partir de ahora, se declaran las ideas en paro indefinido de frases caídas. Dicho he.

Febrero de 2008

26 febrero

Palabras malditas

Buscando en el diccionario las palabras más raras que podría utilizar, encontré:

“Heteromancia. Adivinación supersticiosa por el vuelo de las aves."}

Y pude comprender entonces, por qué siempre que pronuncio tu nombre, los cuervos que me sobrevuelan comienzan a cavar mi tumba con sus picos. Las palabras malditas que uno nunca llega a comprender del todo bien.

20 febrero

Encuentro con la ley

Todavía sin saber qué pasó, apenas alcanza a levantar la cabeza unos centímetros del suelo. Algo viscoso, algo caliente, algo así como la sangre, le escurre a partir de la nuca hasta comenzar a aglutinarse en algún hueco de la acera. Como en sueños, casi como de película muda, las luces de una torreta y el ulular de la sirena, lo confunden aún más. Cierra los ojos y el cuerpo comienza a aligerarse, tanto, que segundo a segundo, lo siente cada vez menos, como si no existiera, como si fuera de aire. La rendija de luz se agota y la oscuridad se aposenta para siempre. Nunca sabrá qué fue lo que ocurrió ni por qué lo traicionaron.

14 febrero

Sin título

Lentamente, con sumo cuidado, procurando no hacer ningún ruido que rompiera la quietud de la madrugada, se quitó las alas y la aureola y se acomodó en una orilla de la cama, junto a él. En pocos instantes, los dos estaban sumergidos en el más profundo de los sueños: el de su propio amor. Una vez que el Sol comenzaba a asomarse por el horizonte, ella se levantó y regresó al cielo, a seguir trazando rutas y caminos entre las nubes. Ya llegaría una nueva noche para dormir una vez más al lado de su amado.

06 febrero

Una de frontenis

Mis palabras rebotan, como pelotas huecas de frontón en la fría pared de tu enojo e indiferencia. Yo, que nunca he sido un gran deportista, comienzo a reconocer, que este juego ya lo había perdido desde hace mucho tiempo. Pero duele reconocer la derrota. Mientras, una palabra, otra palabra y una palabra más, caen muertas a mis pies.

02 febrero

Antípodas

" SIN DORMIR

Contigo:
Despierto
Toda
La noche.
Sin ti:
Toda
La noche
Despierto.
Celebro estos dos
Insomnios
Y sobre todo la
Diferencia entre
Ambos."

LUIS MIGUEL AGUILAR


" Los machos, ya se sabe, no tienen ni puta idea de lo que es el amor o la sexualidad o el placer. O más bien, tienen de ello ideas de puta: aprendidas en brazos de prostituta, en cuartos de mal olor, a través de conceptos de carnicería."

SABINA BERMAN

Enero de 2008

29 enero
El cuentacuentos
Siempre quiso poder contar miles de historias y que la gente no se aburriera de él. Pero cuando comenzaba a plantear el inicio de una de ellas, de manera automática terminaba por contar el relato en donde daba a conocer a las personas el día en que de manera fortuita pudo ver a los ojos a la mujer que había buscado toda la vida y ésta le había robado la vista. Después de un tiempo todos se sabían el principio y el final; el cuentacuentos ya no tiene quien lo escuche. Cada vez le quedan menos sentidos, ¿cuál será el siguiente en perder?

14 enero

Las olas

Ni siquiera el mar le pareció profundo; no tan profundo como las dudas que albergaba en su corazón. Así, de cara al sol, sólo se dedicó a flotar en él y dejó que la marea la llevara a donde quisiera. Quizá las olas podrían encontrar un lugar en el mundo para ella.

***

"El hombre vive y muere en lo que ve, pero sólo ve lo que piensa".
PAUL VALERY
07 enero

Año Nuevo
El Año Nuevo llegó 365 días antes de que estuviera preparado para recibirlo con todas las cosas de la vida en orden. Siempre me sorprende así.

Diciembre de 2007

04 diciembre

Querer y poder
Quisiera poder decirte, comentarte, explicarte, susurrarte, pedirte, solicitarte, rogarte y de nuevo no encuentro las palabras ni la fuerza para hacerlo; mientras, tu figura se aleja y se funde con el horizonte hasta desaparecer en él. Me levanto y el silencio se desprende de mi piel cuando ya no es necesario. Otra vez el maldito querer y no poder

15 diciembre

El titiritero

El pacto se había roto. El pueblo creyó que esta vez sí ejercería el voto libremente. Los aspirantes comenzaron a vivir la democracia. Las elecciones se llevaron a cabo. Nadie quedó contento. El único que sonrío nuevamente, fue el titiritero quien fue el que montó toda la función.
20 diciembre

Sin palabras
Le pidió que la mirara una vez más a los ojos y que recitara el poema aquel con el que ella se enamoró de él. No lo hizo; simplemente no pudo. No es que no recordara esas líneas, lo que nunca pudo recordar con claridad, era el hecho de que sólo se las hubiera dicho a ella.

25 diciembre

Una suma mermada por infinitas restas

"Uno, me aventuro a decir, es los libros que ha leído, la pintura que ha conocido, la música escuchada y olvidada, las calles recorridas. Uno es su niñez, unos cuantos amigos, algunos amores, bastantes fastidios. Uno es una suma mermada por infinitas restas'

SERGIO PITOL

28 diciembre
Dos ideas que andaban rondando... se aceptan sugerencias para los títulos
*
Cerró los ojos y lo besó. No supo si fue nostalgia, añoranza, necesidad o venganza, pero creyó firmemente que nuevamente se enamoraba de él.

**
Se acercó al umbral y miró el universo entero. Se cimbró como si un rayo lo hubiera tocado y creyó desfallecer. Respiró hondo hasta retomar el control de su cuerpo. Sin pensar más en lo que había visto, casi indiferente, regresó al sillón que está en la orilla de la habitación. Tomó el diario y esperó que la vida consumiera los últimos meses, días y horas que tenía reservadas para él.

Noviembre de 2007

20 noviembre

La princesa, la noche y los sueños

Todas las noches, a la misma hora, en el mismo instante, mientras se acuesta, los fantasmas le secuestran la calma y el sueño, y sobre la cama, comienzan a cantarle y danzarle hasta la madrugada. Nadie creería que la princesa de ojeras grandes no puede dormir. Sólo ella conoce y entiende a sus fantasmas. Entre bostezo y bostezo sonríe, porque cree que algún día podrá acostarse y quedarse a solas con sus sueños.

22 noviembre

El loco del pueblo

Hablaba y el corazón le salía por la boca. Era la emoción que no podía contenerse por más tiempo. Cuando por fin salieron las palabras y las frases, el universo recuperaba el orden que había perdido. El acto se había consumado. La palabra había derrotado una vez más al silencio, a la apatía y a la soledad. Noche tras noche, historia tras historia, el loco del pueblo recuperaba el sentido del habla de todos aquelllos que se habían sumido, sin saber, en la bruma del olvido de la gente.

30 noviembre

Sin título II

Él, dejó un rastro líquido con sus lágrimas y se alejó de ahí para siempre.

Ella, sintió que se ahogaba sin remedio en esas huellas húmedas de la ruptura.

El sol se encargaría de borrar todo testimonio de tristeza y evaporaría de la memoria cualquier recuerdo de esa nueva historia de amor fallida, un acto tan común y tan frecuente en la ciudad, como la temporada de lluvias, que año con año, moja los humores de sus habitantes.

Sobre el horizonte, un día, un arcoiris comienza a vislumbrarse sobre el cielo gris que nos cubre.

La esperanza pide una nueva oportunidad.

Octubre de 2007

04 octubre

Una más de Nabokov

"La vida de los hombres es una breve rendija de luz entre dos eternidades de tinieblas".

10 octubre

Este lo rescató Bk, quien siempre me salva de todos mis naufragios

Sin título

"Para quitar el óxido al corazón hay que aplicar el ácido del olvido a la memoria. Borrón y cuenta nueva. Lo malo de la corrosión es que también afecta a las entrañas. Nunca se sale sin heridas del océano del amor".Me lo dijo un viejo lobo de mar, cuando apenas y me había lanzado al agua, en la frágil barca de mis sentimientos. Solo unos instantes y ya naufrago a la deriva.

16 octubre

El concierto de rock

Se enteró por un blog. Lo verificó en Ticketmaster. Sacó el dinero de la alcancía. Por poco no alcanza boleto. Las semanas previas fueron eternas. El día llegó. Se había anticipado 48 horas para encabezar la fila de entrada y lo había logrado. Sin dormir, comer y descansar, el organismo comenzó a pasarle factura. Se sintió mareado y casi se desmaya sobre la valla que separa a los espectadores del escenario. Lo retiraron del lugar, las asistencias médicas creyeron que estaba borracho. Lo pusieron en una camilla. Cuando lo subían a la ambulancia, el estruendo de los primeros acordes del concierto lo cimbraron de la cabeza a los pies. Era tanta su debilidad, que ni siquiera su tristeza se pudo convertir en lágrimas. Su lugar, el espacio por que el que tanto había soñado y esperado toda la vida, lo ocupó, sin que él nunca se enterara, la novia que meses antes lo había cortado, por no coincidir en gustos musicales. Nadie sabe para quién trabaja.

25 octubre

La vida pasa

Las ideas y las frases se encuentran en una isla de la que mi mente no tiene ni la más remota referencia. Sin angustia y sin preocupación me tiro en un sillón y comienzo a contar sin prisa los minutos y las horas, con sus olores y colores, hasta que de repente ocurra algo que me estimule a salir de esta celda sin palabras.

26 octubre

La cosa es así

El problema con las palabras es que una vez que las dices, ya no te pertenecen.

Septiembre de 2007

06 septiembre

Un día de tantos

Me dolías en la memoria a eso de las 10 am, justo antes del receso que hago para tomar café. Te odié hasta cerca de las 3 pm, que es cuando comienza la pausa que hacemos en el trabajo para salir a comer. Comencé a entristecerme al momento del postre, pero una reunión urgente me volvió a la realidad. Por la noche, a la hora de cenar, no pude más y estallé en llanto. Enjugué las lágrimas, ya que era tiempo de ir a la cama. En el instante que el día se agotaba para dar paso al siguiente, una vez más comenzaste a dolerme, me dio por odiarte y también me puse triste. Así son estos días sin ti.

08 septiembre

Como de novela

Mi historia, sin tu historia, no es historia: sería pura ficción.

Pecando de sinceridad

Un padre realista al hijo:

- Dime cuáles son tus miedos y te diré cuáles serán tus vicios

14 septiembre

El ateo

Era ateo porque afirmaba, que al único Santo al que le rendía veneración, le llegó la vejez y se tuvo que retirar de los cuadriláteros.

Una mañana confusa

El letrero sólo decía:

“Busco alma en venta. Mejoro cualquier oferta”

No entendió, pero de cualquier modo se colocó al final de la fila; esa mañana, estaba dispuesto a negociar hasta con el mismísimo Diablo.

25 septiembre

La Rana y el Arcoiris

A la amiga Rana, le dolían los ojos de tanto llorar. No sabía porqué, pero ese día se sentía tan triste, que quiso llenar el estanque con sus lágrimas. Cuando los ojos estaban a punto de reventarle, vio el reflejo del Sol en el agua, y detrás de éste, un arcoiris que pintaba de colores el cielo. La amiga Rana dejó de llorar y entendió, que los días tristes y grises no duran toda la vida.

Agosto de 2007

10 agosto

La triste

Mientras la vida le exige cada día más, ella se deja morir poco a poco en las frías paredes de su soledad


Lo leí de Vladimir Nabokov

"Su vida era tan aburrida, como cualquier reporte de autopsia"

21 agosto

La despedida

Con el tiempo apuntándole a la sien derecha. Con la angustia taponándole la garganta y las palabras. Los brazos vencidos con la sola idea de no volverse a encontrar. Para colmo, la esperanza tenía pase de abordar y también se fue en el avión. Así de simple y llana fue la despedida.

domingo, 25 de enero de 2009

Julio de 2007

05 julio

Un día después

Hoy, ando buscando respuestas en las estrellas, cuando las debo de encontrar en las personas

06 julio

La flor de fuego

No conviertas mi recuerdo en tu memoria en una flor de fuego, porque arderá en tus manos y las cenizas serán esparcidas por el viento.

10 julio

Rescatado de un buzón olvidado

El perro

Mientras la vida se consume y se agota, yo sigo siendo el perro que le ladra a la luna todas las noches

14 julio

Las gotas y la piel dura

Era la mujer con la piel más áspera y dura que se pudiera imaginar. Especie de coraza y fortaleza contra las intenciones de los demás. Con falso orgullo, se pavoneaba por la vida de su condición epidérmica. Quienes se habían atrevido a acercarse lo suficiente para intentar romper el cerco, sin lograrlo, afirman que lo único que se podía oir a través de la barrera, era una especie de golpe húmedo, como de caída de una gota sobre un estanque. Hoy, esas gotas la ahogaron. Ella murió por el canto triste de su corazón.

Y en el último trago nos vamos

- Páramo es la forma elegante de nombrar a la soledad-

Lo dijo un amigo: "No entiendo porqué tanto esfuerzo, leo y sólo logro comprender las obviedades".

La abulia me consume, no sé de qué me habla. Lo obvio nunca ha sido evidente para mí. Sigo bebiendo, sin poses, sin pretensiones. Venga un trago más y todos los que siguen.

José Alfredo desde la sinfonola sigue insistiendo:

- Y en el último trago nos vamos -

Ya veremos

18 julio

El optimista

Se paró en medio de todos y gritó:

-"Ey, sépanlo todos de una vez. Este es mi nuevo rostro, grábenselo bien"

Una vez que salió, nadie dijo nada y continuaron con sus tareas cotidianas. En el fondo, sabían que era tan sólo uno más que quiso borrar la monotonía de su cara, colocándose la máscara de las falsas ilusiones. En pocos minutos, nadie se acordaba de él. Para tristeza de muchos, todo seguía igual.


25 julio

Tomado de una libreta de apuntes de la convalecencia de mi fractura de hace un par de años
Nacemos y morimos en la boca de la gente/
dijo el poeta antes, mucho antes/ de
que empezaran a hablar de él.

Leonardo Da Jandra / En el corazón de un sol herido

Siempre juzgan el camino que eliges para transitar el efímero tiempo y espacio de universo que conocemos por vida. Todo parece indicar que la única brújula válida es la que cada uno posee para llegar al azimut que cree corresponderle. Peor asunto es cuando a la vista de los otros, se te reconoce como alguien que extravió los pasos y no puede volver a encontrar la estrella septentrional que le sirva de referencia, para nuevamente recomenzar la fatigosa marcha. No dudes, camina, tampoco la solución es llegar al cruce y no escoger ninguna opción. Un continuo elegir y corregir en tu camino. No confíes en las rutas preestablecidas de los demás. Escucha a tu corazón y aguza los sentidos, que al final del recorrido, el único responsable del mapa que se ha trazado por la vida eres tú. Y recuerda que a cada paso dado, un halo de luz iluminará el horizonte hacia donde siempre has querido llegar. Suerte caminante.


Son tiempos en que los falsos profetas y redentores llenan sus bolsillos de dinero de las personas que, buscando respuestas importantes para sus vidas, son víctimas de las esperanzadoras y huecas palabras de oropel que aquéllos propagan y riegan por doquier, no sin mediar, obviamente, una módica cuota por conducirlos hacia la tranquilidad espiritual anhelada. El conocimiento del hombre y el mundo en el que vive es oficio viejo, cultivado solamente por románticos científicos y anticuarios humanistas. Hoy vale más especular sobre inciertas energías y fuerzas cósmicas, que descubrir y explicar lo que nos rodea por medio de la ciencia. El tarot y el horóscopo son medio y fin en sí mismos, para comprender lo aciago de nuestras vidas. El azar es una moneda lanzada al aire que nunca cae con la cara elegida por las personas. Hoy no hay más método y orden para realizar las cosas, pura suerte y destino se deben esperar en las acciones. Las pasiones y emociones se explican en las estrellas, no en las personas y sus motivaciones. Estamos siendo reducidos a simples marionetas de los nuevos sacerdotes de la energía, de la suerte y el azar. En un mundo cada vez con menos razón y ciencia, cualquier cosa puede pasar, como lo demuestra la cada vez mayor cantidad de embaucadores profesionales.

26 julio

El fugaz instante

Apenas y si fueron dos segundos. Las miradas se encontraron. Las almas se entendieron. La cruel memoria les recordó que ambos pertenecían al pasado. Cada uno siguió por su camino. No hubo más. Apenas y si fueron dos segundos.

Lapidaria

Era la pregunta que guardé por diez años. Era la respuesta que nunca quise escuchar. Era tu vida sin mi vida. Era la triste realidad.
28 julio
El Universo sin ti

Que la lluvia se lleve tus lágrimas. Que el Sol te devuelva la alegría. Que la Luna te acompañe en las noches de soledad. Que la Tierra gire y gire y que te traiga hasta mí. Mientras tanto, aquí las cosas no han cambiado mucho. El trabajo es un excelente refugio contra el remordimiento y la culpa. El teléfono sigue ahí, mirándome casi como con burla, ah, y el cartero, el cartero ya no pasa más, se cansó de ser interrogado a diario por mí. Que la lluvia se lleve tus lágrimas. Que el Sol te devuelva la alegría. Que la Luna te acompañe en las noches de soledad. Y que por favor, que la Tierra gire y gire, y que te traiga de nuevo hasta aquí.

Junio de 2007

16 junio

Monterroseano 2

Por si acaso seguía ahí, mejor rodeó el jardín para llegar a casa y poder dormir.

Cortazariano

Buscó y buscó a la maga y no la encontró. Fue a la estación de policía y sólo pudo hacer el retrato hablado de la chistera por la que ella se había escapado.

Bryce

Para curarse del insomnio hizo un recuento de todos los males que lo habían aquejado para encontrar el motivo de tan grande desvelo. Anotó en orden de gravedad sus miedos y temores y creyó que estaba comenzado a encontrar una cura para su mal. Como casi siempre le solía ocurrir con los documentos importantes, extravió la libreta en que lo había hecho. Cuando el escrito volvió a sus manos, no recordaba cuándo fue que había hecho esos apuntes que le podrían servir para una posible novela. Y así fue, ya está en librerías. Él, sigue buscando remedios para el insomnio.

26 junio

De los días malos

El verdugo repetía de manera autómata la parafernalia de la ejecución. Mientras, al sentenciado, con la soga al cuello, todavía le dio tiempo para reflexionar que no siempre hay días tan malos como el que estaba viviendo. Que había pasado por otros momentos más negros. La diferencia. Lo que los distinguía, es que el día de hoy era simplemente irreversible. Sonrío y volvió a pensar para sí: "este no es un día tan malo"... El verdugo se acercó un paso más y no comprendía la absurda sonrisa del sacrificado, actitud que alimentaba un cierto sentimiento de arrepentimiento. Sin duda, que este sería un mal día para él y, seguramente, una pésima noche

30 junio

De los huecos y las ausencias

Te has ido apenas hace 8 horas y ya no encuentro qué hacer con el hueco que dejaste en la casa mientras vuelves. Me sigue de un lado a otro e incluso se esfuerza por conversar conmigo. Creo que también te extraña. Trato de explicarle que es un viaje rápido y que pronto estarás de vuelta, pero no hay razón que valga para que se aparte tan sólo unos centímetros de mí. Ahora, de nuevo, pegadito a mi costado, vigila y censura las palabras que salen del ordenador. No queda de otra, te espero aquí, despierto, sin sueño una vez más. No vaya a ser que mientras duerma, tu ausencia también vaya tras de ti.